Lira porteña n° 15
Nemesio Antúnez y la cueca larga
Por Jacqueline Mena Urtubia
A partir de la experiencia vivida en el taller Atelier 17, Nemesio Antúnez comienza a desarrollar una nueva beta artística con la técnica de la xilografía, es así como de regreso a chile en 1956, intenta academizar la técnica del grabado sin obtener buenos resultados, por tal razón es que funda el Taller 99 aplicando los planteamientos adquiridos de Stanley William Hayter, fundador del Atelier 17 y quien había llevado las técnicas de reproducción al campo de la creación artística, trasladando de esta forma al taller 99 la “experimentación, libertad creadora, espíritu de grupo”.(www.taller99.cl)
Dos años más tarde, en 1958 Nicanor Parra publica una serie de textos en donde hace un paréntesis en el trabajo Antipoético realizado hasta ese momento para presentar un trabajo de tradición folclórica del poema y la canción. “Propone, por tanto una manera distinta de decodificar el texto poético: a través de la oralidad…” “… Tal como la lírica clásica o romántica, pero con una diferencia clave: el texto debe ser ejecutado musicalmente, por lo tanto tiene una existencia doble, como poema convencional…” “… y como texto de una canción”. (Carrasco. Iván, 2007, p. 166).
Mediante la tradición oral de la cueca, y la utilización de la métrica octosílaba, Parra busca posicionar el folclore en la categoría de literatura uniendo de esta forma dos dimensiones muy alejadas. Es por esta razón que algunos de estos textos pasarán a formar parte del repertorio de algunos conjuntos musicales, tal es el caso de El chuico y la damajuana, Brindis a lo humano y a lo divino y La cueca larga.
Es en este mismo periodo en que Antúnez comienza a incursionar en el arte de la cultura popular campesina, realizando una pequeña colección de murales que intervienen el espacio público en conocidas galerías de la comuna de Santiago, declarados monumentos históricos en el año 2011: Quinchamalí (1958), Terremoto (1958), Sol (1961) y Luna (1961).
Paralelamente Antúnez comienza a trabajar en el diseño de portadas, siendo uno de sus primero trabajos gráficos colaborativos precisamente La cueca larga, tercer poemario de Nicanor Parra, publicada en 1958, diseñada junto a Mauricio Amster y que visualmente consiste en un libro ilustrado a través de la técnica del grabado xilográfico, de 35 páginas, impresas a un color interior y que posteriormente será editado como vinilo en 1966, bajo las mismas características gráficas.
“En La cueca larga de Nicanor Parra, Antúnez retomó a través de dibujos de personajes de trazo curvilíneo y depurado el aire festivo de algunas litografías anteriores de la serie de Quinchamalí. En esta serie de ilustraciones es posible advertir nexos con la Lira Popular, publicación realizada desde la segunda mitad del siglo XIX que reunía versos y xilografías en formato de pliegos”. (www.fundacionnemesioantunez.org)
Sin embargo, más que una influencia escritural, la vinculación de La cueca larga con las liras populares subyace en lo visualmente aportado por los grabados xilográficos de Nemesio Antúnez hechos a propósito para evocar una época precaria en que se producían los primeros pliegos sueltos, trabajos que eran realizados por el mismo poeta popular o por encargo, xilografías que también eran increíblemente toscas como resultado del corte de la madera por una simple navaja, acabado característico que sólo se daba en Chile, ya que este mismo tipo de grabado no se ha reconocido en otras liras de Latinoamérica.
Nicanor Parra La cueca larga, Portada Nemesio Antúnez. Colección: Biblioteca Nacional de Chile, Editorial Universitaria, .1966
Nicanor Parra La cueca larga, Texto Linotype Bodoni, Ilustraciones y portada Nemesio Antúnez, Colección: Biblioteca Nacional de Chile, Editorial Universitaria, .1958
Jacqueline Mena Urtubia
Diseñadora gráfica de la Universidad de Viña del Mar y Magister en Arte mención Patrimonio Universidad de Playa Ancha.
Ha participado en la difusión de diversos proyectos vinculados al Patrimonio Cultural de la región de Valparaíso y Santiago.